25.11.06

Los Hermanitos Hitachi

Hace tres meses fui a Miami a verlo a mi hermano que estaba ahí trabajando y desde ese momento que vengo queriendo escribir un blog al respecto y no lo hago. Creo que porque me daba un poquito de verguenza ya que él es de los pocos que leen este blog... pero al fin y al cabo lo que tengo para decir no es malo y me gustaría que él mas que nadie lo sepa.

Con Tate nos hemos pasado la vida yendo y viniendo de extremo a extremo. Durante nuestra infancia pasábamos de ser amigos incondicionales, a odiarnos con locura en cuestión de segundos. Nunca nadie ha conseguido hacerme enojar más rápido que él. Lo que otros tardan horas en alcanzar, Tate sólo necesita dos segundos.

Tuvimos épocas donde las peleas eran verbales. Otras dónde eran fisicas. Él pretendía que eramos jugadores de fútbol americano y tomaba carrera desde una punta de la casa y se me abalanzaba (el termino correcto es "tackle") hasta que yo caía al piso con él encima y los pulmones sin aire. A veces jugabamos a la lucha libre. Invariablemente él siempre ganaba. Pero a veces yo tambien dejaba mi marca. Literalmente. Me dejaba crecer las uñas a proposito para poder arañarlo. No se necesitaba fuerza, sólo puntería y zácate! quedaba marcado. Qué felicidad me daba verlo enojado por un razguño mientras yo siempre tenía que soportar los moretones que él me dejaba...

Pero una vez que los dos crecimos las cosas se pusieron un poco mejor y las peleas fueron cada vez más escasas. Los que nos conocen saben que es imposible que con los carácteres podridos que tenemos no nos peleemos asi que no voy a pretender lo contrario. Pero definitivamente nunca más volvimos a las peleas dirias de la infancia.

Con los años nos hicimos más y más amigos, aunque a mi siempre me pareció que él se mantenía a una cierta distancia mia (no fisica, obvio, ya que la que se fue a vivir a 16000 km fui yo) pero sí emocional. Era dificil conocerlo. Saber qué pensaba, cómo se sentía. No era facil engancharlo solo, siempre estaba acompañado. Si no eran novias, eran nuestros viejos o amigos. O simplemente era él, que a veces no se da cuenta y no escucha o no presta atencion porque está metido en sus propios asuntos. Y debo decir que yo tampoco le hice fácil acercase ya que yo tambien tiendo a esconderme, a veces sin querer y otras a propósito. Pero desde que se murió nuestro papá hace tres años, definitivamente nos acercamos más que nunca.

Pero nunca habíamos pasado 4 dias solos de vacaciones. Asi que cuando me invitó a ir a verlo a Miami primero me dieron muchas ganas, pero una vez que compré el pasaje y cuánto más se acercaba el viaje, más aprensión me daba. No sé porqué estaba tan ansiosa. Pensaba que sería horrible enterarnos que no teníamos nada para decirnos o que realmente no nos llevabamos tan bien.

Por suerte pude dejar de lado mis miedos y abrirme a la experiencia y dejar que las cosas se dieran por si solas. Y me encontré en territorio desconocido, desarrollando una relacion con mi hermano mayor genial, dónde sentí que le podía contar mis cosas y sabía que él me estaba escuchando.

Asi fue que nos pasamos 4 dias casi exclusivamente solos, charlando sin parar donde estuvieramos: tirados tomando sol, en el mar, caminando por Miami. Nos interrumpieron sólo un par de veces, y por decisión mutua, unas cenas con amigos o momentos de trabajo. Y debo decir que reencontrarme con mi Tate fue todo un placer. Y algo que me gustaría que pudiéramos mantener aún cuando hay novios, novias o familia en el medio.

21.11.06

Juego de niñas

-Y que tal la pasaste anoche con T?
-Barbaro. Nos dimos unos besos... bueno, vos viste... apretamos.
-Ajá... y? que tal?
-Nada, estoy re-decepcionada por que él me gusta mucho pero la tiene muy chiquita. La usa bien pero es chiquita.
-Y a eso le decimos apretar, ahora? Pero cuán chiquita es?
-Muy chiquita. Decepcionantemente chiquita.
-Cortita?
-Un poco y ademas flaquita.
-Hmmmm....
-Si, una cagada total.
-Bueno, sabés lo que tenés que hacer cuando alguien la tiene tan chiquita, no?
-No, que?
-En esa situacion sólo se la podés chupar... y lo bueno que tiene que es como comer un chupetín.